Desde modelos con más de 100 MP hasta pequeños dispositivos de pocos centímetros de diámetro. Un repaso por el presente y futuro de la fotografía digital.
“Cinco megapíxeles no son nada”, esta es una afirmación que se dio en una vaga conversación entre usuarios mientras viajaban en el subte hace aproximadamente un año atrás. Luego de bajar en la estación que me dejaba cerca de mi destino, me quede pensando en que la forma de cuantificar que tienen los usuarios responde a años de la escasa información que han consumido a lo largo de los años.
La ecuación parece simple: muchas pulgadas, mucha memoria RAM, un disco rígido de varias gigas y, por supuesto, mientras más megapíxeles tenga la cámara mejor. Todas estas son verdades a medias. A sabiendas que una computadora debe adaptarse a las necesidades de los usuarios, varios gigas de RAM tiende a unificar no solo este concepto sino también las prestaciones de los equipos. En fotografía digital la regla de oro es que no sirve de nada la cantidad de megapíxeles sino se tiene una buena óptica y mejores sensores.
Con el 2016 sobre ruedas, el mercado de cámaras digitales parece haber encontrado un equilibrio entre calidad y megapíxeles. Salvo algunas excepciones como las que aquí veremos, las empresas están mas concentradas en ofrecer una buena óptica, reducir el tamaño de los equipos y hasta conducir al usuario casual hacia el mercado Semi Pro.
Un sensor de 100 MP
En la nota sobre la feria CES de este año, repasamos los productos más destacados que captaron la atención de los visitantes y que, muchos de ellos, se pondrán a la venta en el corriente año. Un desarrollo que también estuvo presente en la feria anual de Las Vegas fue el sensor Phase One, desarrollado en colaboración con Sony que equipa la poderosa cámara XF 100MP.
El nombre de la cámara deja todo en claro, haciendo referencia a que incorpora un destacado sensor de 100 megapíxeles, algo totalmente fuera de serie. Las características incluidas hacen de esta cámara un equipo único. Ofrece una salida de color de 16 bits y un rango dinámico de 15 pasos, puede tomar capturas con tiempos de exposición de hasta 60 minutos e incluye un novedoso sistema que reduce la vibración a la hora de apretar el gatillo de la cámara.
La XF 100MP utiliza óptica de la reconocida firma Schneier Kreuznach y, claro, apunta a un selecto público que puede desembolsar los casi 50.000 dólares que vale la cámara.
Megapíxeles móviles
La carrera por los megapíxeles y la mejor óptica no solo se plantea en las cámaras profesionales. Las empresas de celulares son otras que prestan especial atención en este importante detalle.
Hace unos años Nokia (ahora propiedad de Microsoft) realizó una importante jugada con el lanzamiento de su Lumia 1020 . Se trataba de un celular especial no solo por ser de alta gama sino por incluir un sensor que llegaba hasta los 41 MP algo totalmente novedoso para un teléfono móvil.
De la jugada, Nokia salió bastante bien parada: el dispositivo tomaba excelente fotografía pero hubo un detalle que se le escurrió entre las manos. Al tratarse de un sensor tan grande el mismo abultaba demasiado la parte posterior del móvil.
Otra jugada de importancia tuvo lugar en 2015, Sony se quedó con la división de sensores de Toshiba incorporando más de 1000 empleados que pasaron a trabajar en la óptica de la empresa japonesa.
Los celulares Xperia Z de Sony se caracterizan por prestar especial atención en la fotografía con sensores de más de 20 MP en cada modelo. Las cámaras de 16 MP parecen ser un estándar en otros móviles. Teléfonos de la talla del LG V10, Galaxy S6 Edge y Note 5 de Samsung y hasta el recién presentado Huawei Mate 8, toman excelentes fotografías ajustándose a este nuevo estándar.
Tendencia vintage
Se dice que toda moda vuelve. Esta afirmación podría aplicarse también en fotografía. Este 2016 vendrá plagado de revival dado que muchas compañías apuestan a piezas de hardware que apelaran a al grato recuerdo de otras épocas.
Una de las empresas que se apuntó a esta movida es Polaroid, la reina de las fotografías vintage. Su modelo Cube es una action cam económica y de diseño súper reducido de solo 3.5 cm por lado. Por supuesto no hay que dejarse engañar por su tamaño dado que el pequeño dispositivo puede capturar videos en Full HD (1080p) y soportar salpicaduras y polvo.
Similar a la propuesta de Polaroid, la gigante de la aventura, Go Pro, ofrece su nueva cámara Session de tamaño similar a la propuesta anterior. También toma videos en alta resolución y ofrece la posibilidad de adaptarse a una decena de eventos gracias a sus carcasas especiales y accesorios extra.
Por último, Kodak aprovechó el CES y anuncio la disponibilidad de una cámara que usa película y graba en formato súper 8, ¿no nos creen? Miren la imagen que ilustra la nota.