El director de operaciones que se puso a cargo de Apple mientras Steve Jobs estuvo con licencia médica, acaba de recibir un premio de 22 millones de dólares por su buen desempeño.
Tim Cook es uno de los contados trabajadores sobre este planeta que puede decir que se siente consentido. El hombre es director de operaciones (COO) de Apple desde 2005. En enero del año pasado, le tocó la difícil tarea de ponerse al frente de la compañía cuando su CEO, Steve Jobs, tuvo que tomarse una licencia médica obligada por seis meses.
Mientras su jefe se recuperaba de un trasplante de hígado, Cook manejó a la perfección el día a día de Apple. Al menos eso es lo que expresó la empresa en el comunicado donde informó que el reemplazante de Jobs acababa de recibir un premio de 22 millones de dólares por su desempeño durante aquellos complicados seis meses de 2009.
Lo cierto es que Cook venía de recibir otros premios en efectivo muy interesantes, siempre contados en millones. Pero este busca llamar su atención más que ninguno, porque últimamente el COO está recibiendo otras cosas: propuestas laborales muy jugosas de empresas por demás importantes.
Pero Apple tiene planes muy importantes para su COO y no lo quiere perder por nada del mundo: se comenta que Cook sería el sucesor natural de Jobs, el día que el CEO decida retirarse.
Como director de operaciones, Tim Cook está a cargo de la cadena de abastecimiento, ventas, servicio y soporte de Apple, aparte de dirigir la división dedicada a las computadoras Mac. Ingresó a la empresa en 1998 como vicepresidente senior de operaciones.