Usó Google Maps, la atropellaron y ahora demanda a Google

Siguiendo las direcciones del sistema de mapas del gigante de internet, una mujer terminó siendo atropellada por un auto en una ruta y quiere que Google la indemnice en 100.000 dólares.

En 2008, Google agregó en Estados Unidos su opción «Cómo llegar» a Google Maps. Sirve para visualizar en pantalla una ruta sugerida entre dos puntos geográficos. Y se puede aclarar al solicitar una ruta si se la va a recorrer en auto o a pie.

Lauren Rosenberg, residente de Los Angeles, estaba de paseo por la ciudad de Park City, en Utah, EE.UU. Como no conocía la zona, sacó su Blackberry de la cartera y entró a Google Maps para encontrar cómo llegar caminando desde 96 Daly Street hasta 1710 Prospector Avenue. El recorrido que apareció en pantalla mostraba un tramo largo por el Deer Valley Drive. Si bien suena muy tranquilo («Valle de los Ciervos,» en español), en realidad el nombre del camino es un sobrenombre para un tramo de la ruta estatal 224 del estado de Utah.

La señora, confiada de que si Google Maps le decía que tenía que caminar por ahí para llegar a destino, por algo se lo diría, cruzó la ruta. O trató. El auto que conducía Patrick Harwood pasó a la máxima velocidad permitida en la zona, y la atropelló.

Una vez que Rosenberg se recuperó del accidente, llamó a su abogado y le pidió que demandara a Harwood y a Google por, al menos, 100.000 dólares.

La foto que ilustra esta nota no es otra que una toma del Street View de Google, mostrando la intersección por la que cruzó Rosenberg y la ruta que planeaba recorrer hacia el sur. Uds., queridos lectores, en su sano juicio, ¿hubieran pensado en algún momento que era seguro caminar por una ruta como si fuera una peatonal?

«Eran las 6 de la mañana. No había movimiento en la calle [todavía]. Estaba convencida de que iba a encontrar un paso peatonal del otro lado,» intentó explicar Allen K. Young, abogado de Rosenberg a Search Engine Land, el primer medio en dar a conocer tan particular noticia.

«Estaba en una zona que no conocía. Estaba muy oscuro. No había semáforo. Ella confió en que Google la llevaba a cruzar ahí porque del otro lado había un paso peatonal,» contó Young.

Está claro -para todos, menos para Rosenberg, por supuesto- que las direcciones sugeridas por Google surgen de una serie de algoritmos, y no de la experiencia de algún baqueano de la zona. No hay que tomarlas al pie de la letra. Después de todo, tanto en la versión para PCs como la de dispositivos móviles, se aclara que «Cómo llego» es una herramienta todavía en «Beta», y se incluye la aclaración «Manéjese con precaución – A esta ruta le pueden faltar sendas o pasos peatonales.»

«Ya le dije a todo el mundo que entiendo que un jurado la va a considerar culpable en algunos aspectos,» se sinceró el abogado, pero se manifestó seguro de que Google también tiene su cuota de responsabilidad. «Lo analizamos y estamos convencidos de que si le van a decir a la gente por dónde ir, tienen que hacerse responsables de advertirles si un lugar es inseguro,» dijo Young.

Rosenberg asegura que no vio en su Blackberry la advertencia de Google sobre la posibilidad de que a la ruta indicada le faltaran sendas o pasos peatonales. Google, en cambio, informó que la advertencia para dispositivos móviles se implementa desde noviembre de 2008.

Otra historia inédita de Google Maps para la colección…